domingo, 5 de mayo de 2013

Un encuentro prometedor

LA fecundación consiste en la unión de un óvulo y un espermatozoide, formando un cigoto. Este comienza a multiplicarse y tras cuatro o cinco días origina un blastocito, un conjunto de 150 células que tiene forma de esfera hueca: el exterior está formado por una capa de células y el interior está lleno de un fluido donde se encuentra otro tipo de células, las llamadas células madre embrionarias.
Cuando el blastocito se implanta en el útero, las células del exterior originan la placenta y las interiores comienzan a transformarse en lo que será un feto y un bebé. Entonces, cuando se produce la implantación en el útero, es cuando decimos que sin duda existe un embrión humano.


Células madres
Las células madres son células de un organismo que aun no están especializadas en ninguna función, y que pueden transformarse en los distintos tipos de células de un adulto, además son capaces de multiplicarse.
Provienen del fluido interior del blastocito, y su función natural es transformarse en un feto y un bebé.
Las células madres son fundamentales en los procesos de crecimiento y de reparación de tejidos dañados.
Todos los animales y vegetales poseen células madres en su madurez (en la médula ósea, el cordón umbilical, hígado), pero abundan en especial en embriones y fetos.
Existen 3 tipos de células madres, en función de su capacidad de transformación:
- Totipotentes: pueden dar lugar a TODOS los tipos de células de un organismo. Pueden crecer y formar un organismo completo, existen hasta los 2 días tras la fecundación.

- Pluripotentes: pueden dar lugar a células de cualquier tejido, duran hasta los 5 días tras la fecundación.

- Multipotentes: solo crean células de un tejido determinado, aparecen a partir del 5º día tras la fecundación.

Producir células madres podría servir para curar muchas enfermedades, pero hay que conseguir que no sean rechazadas por el organismo.

Clonación
El primer mamífero clonado fue Dolly, se consiguió extrayendo el núcleo de un óvulo de oveja, donde se encuentra toda la información genética, e implantar en su lugar el núcleo de una célula mamaria de otra oveja adulta.
Se había creado un clon creado mediante una técnica que recibe el nombre de transferencia nuclear.
La clonación puede también suceder de forma natural, en organismos unicelulares, plantas, y también animales. Incluso en el ser humano, este es el caso de los llamados hermanos gemelos univitelinos. Se trata de un proceso que produce individuos genéticamente idénticos.


Una ficción que se está haciendo realidad
La clonación terapéutica busca conseguir células madre que puedan ser empleadas para regenerar tejidos enfermos o dañados sin problemas de rechazo. Estos permitiría reconstruir lesiones de infartos, quemaduras, fracturas graves, tejidos afectados por diabetes, alzheimer, parkinson leucemia o artritis reumatoide.
También se investiga para la regeneración de órganos aunque se están dando los primeros pasos.
El objetivo de la clonación reproductiva es lograr embriones humanos con el mismo ADN de otra persona para conseguir un recién nacido idéntico a ella en sus genes. También intentar recuperar especies de animales y plantas desaparecidas o en peligro de extinción.
La "desdiferenciación" que es la posibilidad de que una célula plenamente diferenciada pueda volver a tener el potencial de una célula madre para diferenciarse otra vez, es para algunos investigadores el proceso que antes tendrá plasmación en la clínica.
El fraude científico
La clonación de embriones humanos ha estado llena de fraudes como por ejemplo: en noviembre de 2001 una empresa norteamericana había logrado obtener embriones humanos por clonación, lo publicó la revista Scientific American. Pero los experimentos no habían pasado los rigurosos controles.
En febrero de 2004 saltó la noticia de la primera clonación de embriones humanos, la noticia la daba Science, detrás había un equipo pionero de investigadores surcoreanos encabezados por Hwang Woo-Suk. Dos años después se descubrió que el laboratorio había falsificado pruebas de sus descubrimientos.
O el más famosos del cráneo de Piltdown, presentado en 1912 como el eslabón perdido entre los simios y los humanos. 41 años después se supo que era un montaje y que parte de la mandíbula era en realidad de un orangután.

Desafíos éticos
La eficacia de la clonación es bajísima y también un transplante de células madre podría crear un cáncer en el receptor, dada su tendencia a multiplicarse.
La clonación reproductiva no está todavía lo suficientemente desarrollada para conseguir seres humanos sanos. Los pocos animales clonados que llegaron a nacer han presentado una amplia variedad de anomalías: envejecimiento prematuro, problemas de corazón y pulmón, riñones deficientes, intestinos bloqueados, sistema inmune debilitado y malformaciones físicas.
Éticamente se discute la clonación terapéutica, esto depende de lo que consideres embrión. Si consideras embrión un cigoto en una placa petri, la considerarás inaceptable. Por el contrario, quienes no piensan así no ven objeción. Y otra preocupación es que se pretenda conseguir humanos con determinados genes.

1 comentario:

  1. Bastante completo. Lo único, podrías haber añadido que la clonación reproductiva está prohibida en la mayoría de los países, por no decir en todos.

    ResponderEliminar